EDUCACIÓN Y EMPRESA
En estos momentos las empresas del país dedican millones de euros cada año a la formación. Una buena parte de esta formación (liderazgo, resolución de conflictos, comunicación positiva etc) está dentro de lo que podríamos llamar «inteligencia o educación emocional».
Las relaciones entre nosotros, las personas, no son fáciles y menos hoy en día en que no tenemos tiempo para parar a pensar (en el que queremos y en para qué hacemos las cosas etc), lo que ocasiona, a menudo, conflictos entre compañeros de trabajo, familiares o amigos.
La Empresa es el lugar donde más relaciones obligadas entre las personas se producen, y se ha dado cuenta en seguida que la formación en habilidades emocionales soluciona buena parte de estos pequeños o grandes conflictos que día a día se viven dentro del trabajo. Es por este motivo que el aumento en este tipo de formación ha sido exponencial en los últimos años.
Lo que yo me pregunto es qué pasaría si esta formación se diera cuando tenemos 10 o 11 años. ¿Alguien se lo ha preguntado?
Con el dinero que la empresa dedica en sólo un año, habría para introducir esta formación en todas las escuelas. Con una diferencia inmensa, que lo que tú aprendes con 35 años en 30 horas, los niños lo harían en 10.
Me imagino esta situación, que las habilidades emocionales están introducidas en nuestro sistema educativo. Evidentemente la fortaleza interior de los alumnos aumentaría en pocos meses y los resultados académicos (informe Pisa, etc) que tanto interesan a los políticos también.
Pero lo que imagino después de 10 años se me pone la piel de gallina. Estos niños se convertirían en adultos que llegarían a las empresas con toda esta formación aprendida, y lo que es mejor interiorizada con 10 años de experiencia!. Es decir, personas con capacidad de esfuerzo y fortaleza interior para tirar del carro ante cualquier dificultad, con habilidades para trabajar en equipo y de comunicarse de forma positiva con los compañeros con lo que los conflictos se convertirían en buen rollo, solidaridad y aprecio.
¿Os podéis imaginar cómo cambiaría la empresa, nuestra vida? Habría ILUSIÓN y con ilusión se puede cambiar el mundo… al menos nuestro mundo.
Por mi trabajo que lo que imagino puede ser una realidad, una realidad posible si la sociedad civil y sobre todo el mundo de la empresa se compromete con la educación de este país. Nosotros (La Granja escola, Fundación para la Educación) lo estamos haciendo con resultados… eso quiere decir que tenemos la prueba que este planteamiento que os hago es posible.
Educación y empresa deben hacer cosas juntos, al fin y al cabo, todos los niños de las escuelas acabarán en alguna empresa ¿no? Entonces no entiendo esta separación.
Todos podemos hacer algo para cambiar el mundo, la empresa también.
Vamos pues.