El pasado jueves veintiocho de abril se presentaron en el Teatro – Auditorio de Granollers las conclusiones del Proyecto Educativo MILLOREM. Un grupo de trabajo coordinado por el profesor de secundaria Toni Argent Ballús ha analizado los datos recogidos de las encuestas realizadas a más de doce mil alumnos, de doce a dieciséis años, de cincuenta y dos centros de secundaria del Vallès Oriental; que representan el noventa y cinco por ciento de cobertura. A partir de estos datos se han buscado las causas del fracaso escolar y se han propuesto mejoras.

El Proyecto Educativo MEILLOREM, muy riguroso en cada uno de sus apartados, nos lleva a la conclusión de que el fracaso escolar es plenamente presente dentro del sistema educativo actual y una de las causas más destacables, por no decir la principal, es la FALTA DE ESFUERZO y, en este sentido se hacen las siguientes reflexiones:

Los últimos treinta años han sido de constante cambio social, económico, cultural, religioso… pero hay cosas que no deberían cambiar nunca como es la necesidad de esforzarse. Partiendo de esta base, cuando hablamos de los chicos y chicas, tenemos que tener claro que son los que formarán parte de las generaciones futuras de trabajadores y trabajadoras de nuestro país que deberán sacar adelante nuestros ayuntamientos, nuestras empresas, nuestras asociaciones , escuelas, etc. ¿Cómo salir adelante si cada vez están desapareciendo aspectos tan importantes como el esfuerzo, la responsabilidad, la educación y el trabajar para hacer bien las cosas?.

Hoy en día un número elevado de chicos y chicas ponen en práctica lo que conocemos como LEY DEL MÍNIMO ESFUERZO, convirtiéndose en un peligro para nuestra sociedad y que cada día que pasa tiene más seguidores. Se les da prácticamente todo masticado, persiguen lo que es fácil, lo que no cuesta, lo que no les hace pensar. Para conseguir algo en la vida hay que dedicarle esfuerzo. Según Aristóteles, «más se quiere lo que con más trabajo se consigue» y realmente es verdad. Lo que no nos cuesta nada no le damos importancia pero lo que nos cuesta lo recordamos.

La poca implicación de los valores de la cultura del esfuerzo en el terreno educativo nos lleva toda una serie de carencias como es la ausencia de ilusión y entusiasmo, poco dominio de las técnicas de aprendizaje, desorientación, absentismo escolar…, que tienen como consecuencia una educación de dudosa calidad. ¿Por qué tengo que estudiar? ¿De qué me servirá?; Se preguntan muchos jóvenes. Por desgracia, saben muy bien lo que no quieren pero les cuesta saber lo que realmente quieren.

Platón (427 aC) en su libro LA REPÚBLICA, nos dice que «la educación comienza desde la más tierna infancia y es el único camino para conseguir una sociedad justa». La educación, pues, es la base y debe ser una de las principales prioridades de nuestra sociedad para avanzar dignamente. Nuestro sistema educativo debe mejorar y debe fomentar el trabajo y el esfuerzo. Todos estamos implicados. Espabila