El Alcade de Granollers con la Fundació Espavila
¿Opina sobre la creación de una fundación, la cual quiere potenciar la cultura del esfuerzo?
Cataluña es un país rico en iniciativas que surgen de la sociedad civil. Iniciativas que han contribuido decisivamente a definir estrategias de futuro. En esta línea se inscribe la Fundación que habéis creado. Una Fundación que reivindica un valor esencial: el esfuerzo.
¿Cree que las personas ya no educamos con los valores de la cultura del esfuerzo? ¿Qué hábitos cambiaría?
Nuestra sociedad es cada vez más compleja, más poliédrica. Y, por lo tanto, más llena de matices. Por eso la respuesta a esta pregunta no puede ser un si o un no. Creo en la capacidad de las personas para mejorar y transformar su ciudad, su país, su entorno. Y para hacerlo posible, la educación es la clave. Educación en el sentido más amplio. En la escuela, pero también en casa, en la calle, en la instalación deportiva, en los equipamientos culturales. Personas libres y responsables capaces de construir su propio futuro. Desde el esfuerzo y el compromiso.
¿Cómo motivaría a las personas a esforzarse para conseguir sus objetivos?
Hablando. La palabra, el diálogo es el instrumento esencial para la educación. Y confiando.
¿Es siempre positivo esforzarse o por el contrario hay objetivos que no son accesibles?
Sin objetivos no hay camino. Aunque el camino nos parezca, a veces, muy lejano.
¿Cree que nuestra juventud llegará a entender la necesidad de hacer esfuerzos para llegar a un objetivo?
Conozco a muchos jóvenes que están instalados en la cultura del esfuerzo. Permitidme un ejemplo: La Fiesta Mayor de Granollers. Las Juntas Directivas de los Grupos están integradas por gente muy joven que demuestra año tras año su capacidad de trabajo y de compromiso con la ciudad. Hay que valorar, especialmente, las buenas prácticas.
¿Qué les diría a aquellas personas que ya no se esfuerzan porque han perdido la motivación y sólo siguen la corriente de la sociedad actual?
No comparto el pesimismo que se infiere de la pregunta. La sociedad actual es cada vez más compleja y en ella conviven tendencias muy diversas. Ni mejores ni peores que en otras épocas. Diferentes. Con más estímulos, con más información, con más expectativas, con más oportunidades, con más servicios que nunca. Hay que definir objetivos e itinerarios. Y avanzar a partir de la confianza en las propias posibilidades.
Algunas palabras para las personas de Granollers …
La ciudad, la sociedad, es necesariamente un proyecto colectivo. Somos las personas las que le damos forma, textura y color. Sólo se puede construir desde la diversidad de miradas, la capacidad de diálogo y el esfuerzo de cada uno de nosotros.
Como comentario final, quiero desear mucha suerte a la Fundación
Josep Mayoral
Alcalde de Granollers