Tengo 76 años y la sociedad me considera un anciano. No lo soy. No quiero serlo. No quiero ser un lastre para mi familia, ni una lata para mis amigos, ni una carga para la Seguridad Social. Trato de no oxidarme mentalmente (escribo, leo, estoy al tanto de lo que pasa en el mundo) y de no oxidarme físicamente (corro alrededor de una hora y cuarto cinco veces a la semana). El mundo me considera un viejo. No quisiera parecer pretencioso, pero no lo soy.

Este domingo he corrido en la pista de atletismo de la Marbella los mil metros solidarios de la ELA en 5,09. La gente me considera un anciano. Y no lo soy. No quiero serlo. En marzo hice mi 45 maratón (5h39) todo recaudando fondos para la investigación sobre la diabetes infantil y ya me he inscrito para la del año que viene. Tengo suerte. Mantengo ilusiones y proyectos. Quisiera, modestamente, que este escrito sirviera para reivindicar que a una edad avanzada se pueden hacer cosas. Sólo hay que proponerlo.

Escrito por Miquel Pucurull (Barcelona)

Respuesta a la carta de Miquel Pucurull

Estimado Miguel: He leído atentamente tu escrito «No quiero ser un anciano» y me ha gustado mucho tu forma de pensar. ¿Como puede calificarse de anciana una persona que tiene tantas cosas que hacer? Ya sé que gran parte de la sociedad actual, seguramente llevada por el consumismo y carente de valores, considera ancianas a las personas mayores cronológicamente; pero yo como presidente de la Fundació Espavila, que fomenta la cultura del esfuerzo, quiero animarte a no decaer nunca. Una persona es anciana, independientemente de su edad, cuando ha perdido la capacidad de aprender cosas nuevas y actualizar sus conocimientos y actitudes. En este sentido Anatole France dijo: «cada uno tiene la edad de sus emociones». Termino con esta reflexión: ¿Cuántas personas de edad cronológicamente joven mueren estando en vida y viven un montón de años pudriéndose sin pena ni gloria hasta que reciben sepultura? Mira Miguel, dejame decirte que eres un ejemplo a seguir por todos.

Joan Vila Pont, Presidente Fundació Espavila. www.espavila.cat